El Dr. Johnson Dice Relájate

Relaja tu Cuerpo y Mente

¿Parece que hoy en día escuchamos más sobre enfermedades autoinmunes que hace 10 o 20 años? También parece que cada año se diagnostican más personas, junto con el descubrimiento de nuevas condiciones autoinmunes. Las estadísticas de la Asociación Americana de Enfermedades Relacionadas con la Autoinmunidad ahora estiman que casi 50 millones de personas (aproximadamente el 20 por ciento de la población) viven con una enfermedad autoinmune solo en este país. Pero, ¿por qué hay más información, conversación y conciencia sobre las enfermedades autoinmunes? Algunos investigadores creen que es porque estamos más estresados que nunca antes.

¿Pero, qué tiene que ver el estrés con esto?

El estrés es casi una parte natural de nuestra existencia diaria. El trabajo, el tráfico y las listas de tareas interminables pueden causar un aumento del estrés. Pero cuando la tensión se acumula, tiene efectos muy negativos en tu cuerpo.

Algunos de los efectos secundarios del estrés incluyen:

• Dolores de cabeza y migrañas
• Apretar la mandíbula y rechinar los dientes
• Boca seca
• Respuesta inmune disminuida, infecciones frecuentes y altos niveles de inflamación
• Acidez estomacal, náuseas y dolor de estómago, así como problemas digestivos
• Dificultad para respirar
• Palpitaciones cardíacas, aumento de la presión arterial y dolor en el pecho
• Mayor riesgo de derrame cerebral o ataque cardíaco
• Dificultad para dormir e insomnio
• Ansiedad y depresión

El estrés puede aumentar la presión arterial, dejando a quienes lo padecen en riesgo de ataque cardíaco o derrame cerebral.

Cuando te enfrentas a un factor estresante, tu cuerpo entra en modo de «lucha o huida». Cuando esto ocurre, la inflamación aumenta. Si estás constantemente estresado, tus niveles de inflamación permanecen altos durante largos períodos.

La inflamación crónica puede ser la causa de muchas condiciones autoinmunes diferentes. Dos condiciones en particular que se cree que son desencadenadas por el estrés incluyen la artritis reumatoide y el lupus eritematoso sistémico.

El estrés también ha sido vinculado a un aumento en los brotes de síntomas de enfermedades autoinmunes.

Cómo Reducir el Riesgo

Una forma de reducir el riesgo de desarrollar una enfermedad autoinmune es reducir tu estrés. Más fácil decirlo que hacerlo, ¿verdad? Aunque pueda parecer un consejo trivial, realmente no lo es. Es algo serio que deberías detenerte a considerar. Sugerimos que pruebes pasos de autocuidado para reducir tu estrés, como un pasatiempo, ejercicio o yoga. Otras formas en que las personas trabajan para reducir el estrés son mediante la meditación, la música relajante y enfocándose en la respiración nasal.

Los investigadores médicos también están trabajando en nuevas formas de reducir el estrés crónico, incluyendo la estimulación de los nervios parasimpáticos que se encuentran en los pulmones inferiores. Los nervios parasimpáticos ayudan a desencadenar hormonas para ayudarte a relajarte.

Si estás viviendo con una condición autoinmune, puede que quieras explorar los beneficios de los ejercicios para aliviar el estrés para minimizar los brotes. Además, muchas personas que viven con enfermedades autoinmunes han visto mejoras en su condición a través de la terapia con células madre. Aprende cómo la terapia con células madre puede ayudarte llamando al 214-643-8665 para programar una consulta hoy mismo.